Sin noticias de Hazard. Las alarmas saltaron en el Real Madrid cuando el belga se lesionó ante el PSG y tuvo que retirarse del Bernabéu apoyado en los fisios. De madrugada, el belga se sometió a las primeras pruebas en el hospital Sanitas La Moraleja, pero de momento no hay parte médico de su lesión. Y quedan tres semanas para el Clásico.
Fue precisamente su compatriota y compañero de selección Meunier quien sacó a Hazard del campo con una dura entrada que le pilló con el tobillo mal apoyado. La torsión era fea, fea. El belga se fue del campo muy tocado apoyándose en los fisios. Después de ser atendido en la banda y como el dolor no remitía, Zidane lo cambió por Gareth Bale en el minuto 68.
Saltaron entonces todas las alarmas en el Real Madrid porque las imágenes de televisión ponían los pelos de punta. La lesión de Hazard, que debería confirmarse a lo largo de este miércoles, puede ser un esguince o algo peor si estuvieran afectados los ligamentos o el peroné, una lesión que podría frenar en seco su integración en el Real Madrid y que le haría perderse varios meses de competición.
Un tobillo operado en 2017
Quizá por ello a toda prisa Hazard pasó pruebas de madrugada en Sanitas La Moraleja, al que llegó sujetándose en muletas pero apoyando el pie, tal como se puede apreciar en una fotografía realizada por un aficionado. El mismísimo Zidane se había mostrado preocupado por la lesión de Hazard tras el encuentro: «Es más que un golpe, es golpe y torsión».
Curisosamente, el belga se fracturó el tobillo derecho, ese mismo, en 2017 en un partido con la selección de Bélgica. Zidane y el madridismo contienen la respiración.
